Philip Kotler define la necesidad como “una sensación de carencia de algo, un estado fisiológico o psicológico”. Para satisfacerla existen los productos: un conjunto de caracteres y atributos que satisfacen necesidades.
Es decir, en mercadotecnia, un producto es una opción elegible, viable y repetible que la oferta pone a disposición de la demanda, para satisfacer una necesidad o atender un deseo a través de su uso o consumo.
De estos se derivan cuatro tipos principalmente:
- Genéricos: Se trata de los productos con las ventajas básicas.
- Esperados: Estos están constituidos con todo lo que acompaña al producto genérico.
- Aumentados: Todos los productos con las características que se ofertan para diferenciarlo de la competencia.
- Potenciales: Estos se componen de todo lo realizable para captar y mantener a los compradores.
TNS reveló en su encuesta anual “Producto del Año” (2016), basada en 10 mil encuestados, cuáles fueron los productos más valorados por los consumidores.
Entre las mujeres, fueron los que forman parte del sector de la cosmética, seguidos por otros sectores como el de los platos preparados, cuidado capilar, lácteos y productos de higiene personal.
Para los hombres, el sector más innovador es el de la alimentación y bebida, como los platos preparados, salsas o lácteos.
Necesidad, deseo y demanda, las 3 claves del marketing que debe conocer a la perfección