Para nadie es un secreto, el sector de bienes raíces es especialmente lucrativo. Hablamos de una industria que cree y que tiene muchas áreas sobre las cuales trabajar para generar ingresos. Desde la venta de una casa o departamento hasta la renta de un local comercial, son muchos las líneas en las que los profesionales del sector se pueden mover para sumar ingresos. Esto es una de las razones para ser asesor inmobiliario.
Los números respaldan al sector. De acuerdo con la Asociación Mexicana de Profesionales Inmobiliarios (AMPI), la industria registró un crecimiento de entre un 5.2 por ciento y 6 por ciento durante 2019.
Ante estas cifras, la industria y sus jugadores se ubican como importantes piezas en términos de empleo.
En esta línea, la Federación Internacional de Bienes Raíces para las Américas (FIABCI), el sector inmobiliario representa 14.1 por ciento del Producto Interno Bruto (PIB) del país, lo cual hace de éste la segunda fuerza económica de México, al ser una industria en la que 98.7 por ciento de sus productos y de los insumos son de producción nacional, que genera 3 millones de empleos y tiene impacto en 78 ramos de la economía.
Lo que se necesita para ser asesor inmobilario
Capitalizar profesionalmente estos números implica algo más que poner un anuncio de “casa en venta” y acompañar a los clientes a visitar el inmueble.
Es necesario capacitarse, encontrar las mejores prácticas, contar con el apoyo de una empresa especialista en el ramo y desarrollar ciertas habilidades.
De tal suerte, Luis Omar Mendez Muñoz, RE/MAX Homelife, Estado de México, afirma que para convertirse en asesor inmobiliario, es necesario tener cuatro características básicas:
- Hambre de emprendedor con intención de invertir en su capacitación
- Ser sociable y alta auto estima para tratar con prospectos
- No tener otra actividad económica dedicarse al 100 por ciento a los bienes raíces.
- Contar con valores éticos similares a los de la oficina que los suma al equipo.
Estos rasgos se pueden desarrollar y fortalecer cuando se cuenta con el respaldo de una empresa como RE/MAX, empresa que en meses recientes, por ejemplo, lanzó la división de lujo en donde una gran cantidad de asesores se han certificado con un curso de dos días para la comercialización de estos inmuebles.