2023 parecía ser el año.
Los años prepandemia, 2019 y 2018 fueron de los mejores años para la industria del cine. 2018 vio 41 billones de dólares, de acuerdo con Box Office Mojo. 2019 los superó con 42.3 y también contó con la película más taquillera en la historia, “Avengers: Endgame” (2.79). El regreso ha cines ha sido más lento de lo esperado y 2023 termina con una lista de más de diez títulos, todos con presupuestos elevados que no cumplieron en la taquilla o bien resultaron en tremendos fracasos. Sí, está el fenómeno Barbenheimer, pero aún y cuando forma parte ya de los anales de la historia, “Barbie” con sus 1.4 billones está por debajo de lo que otros títulos alcanzaban antes. Este año ya ningún título lo superará. Entre los títulos que dan buena cuenta de cuán grave es el tema están “La mansión embrujada” con sus 157 millones de presupuesto y 59 en taquilla; se vio afectada por la huelga de actores, ninguno de los cuáles pudieron hacer promoción. Está también “Indiana Jones y el dial del destino” que hizo 368 de un presupuesto de 300, es decir, no cubrió los costos pues el presupuesto que se declara nunca incluye los gastos de marketing. En la lista están también “The Flash”, “Krakens y sirenas: Los Gillman” y “The Marvels”. Vaya, incluso títulos como “Misión imposible: Sentencia Mortal Parte 1” y “Rápidos y furiosos X” se quedaron muy por debajo de lo que hicieron sus antecesoras. ¿Qué debe cambiar Hollywood?
Cambiar el modelo presupuestal
Pareciera ser que más es mejor. El mejor ejemplo es Marvel que con cada nuevo título fue elevando presupuestos. Le funcionó muy bien la primera década, pero es claro que ya no es así y también es claro que la calidad no está ligada a un mayor presupuesto. “The Marvels” es oficialmente su primer fracaso. Con su presupuesto de más de 200 millones de dólares y una película anterior, “Capitana Marvel” que ingresó 1.3 billones, la decepción es mayúscula. “The Marvels” ha hecho en tres semanas lo que su antecesora hizo en una semana. A la película le irá “bien” si consigue llegar a los 400 millones de dólares, pero se ve difícil con el cierre del año y la llegada de más títulos de perfil alto. Marvel ya planea manejar títulos con un presupuesto mucho más reducido, debajo de los 100 millones de dólares y al parecer el primer título será “Blade”. El ejemplo de Marvel no es único. “Rápidos y furiosos X” costó 349 millones de dólares, “Misión imposible: Sentencia Mortal Parte 1”, 290. Vaya, como medida de acción para éste último caso ya se decidió que la “Parte 2” tendrá otro nombre y el estreno se movió de 2024 a 2025.
Fatiga de franquicias
¿Cuánto se puede estirar la liga? ¿Qué tanto es suficiente? Ésa es la pregunta del millón y una para la que Hollywood aún no encuentra respuesta. Las franquicias siguen funcionando, sin duda, pero su manejo requiere de una dosificación adecuada. Debe existir entre una entrega y otra el suficiente tiempo como para que haya “deseo” por la nueva entrega, pero no demasiado para que se tenga aún presente. 2023 vio muchos regresos: “Misión imposible”, “Indiana Jones”, “Rápidos y furiosos”, “Transformers” y continuaciones de los universos de DC y Marvel. El título más exitoso fue una primera entrega, “Barbie”, le siguen “Súper Mario Bros. La película” y “Oppenheimer”. El primer título que es una continuación es el cuarto con “Guardianes de la Galaxia Vol. 3” que tiene una distancia de cinco años con la anterior, que pasó por una “crisis” que pudo hacer que no volviera James Gunn como director y que funciona bien como una historia contenida y no como una que le aporte a la narrativa del próximo “gran evento” de Marvel.
Una mejor distribución en el calendario de estrenos
Antes de la pandemia lo habitual era tener un par de estrenos fuertes en el mes, dando al menos un par de semanas entre ellos y equilibrando entre segmentos del mercado. Es decir, si había un título familiar el próximo llegaría al mes. Ello da oportunidad de que el título haga un impacto en la taquilla, aproveche las próximas semanas y construya gracias al boca a boca. Este año no fue así. Por ejemplo, el 26 de mayo estrenó “La sirenita”, una semana después “Spider-Man: A través del universo”, la que siguió “Transformers: La rebelión de las bestias” y la posterior “Elemental” y “The Flash”; cinco títulos fuertes en menos de un mes. El único que sobrevivió fue “Spider-Man: A través del universo”. Las películas necesitan tiempo, necesitan aire para “respirar”. El impacto inicial es indispensable, sí, pero si no hay campo para crecer están destinadas al olvido cuando un nuevo título es la novedad, incluso para que el público no se sienta estresado por todo lo que hay que ver.
Mejores estrategias de marketing
Barbenheimer es el ejemplo. El fenómeno generó la sensación de necesidad, de urgencia, de pertenencia y ello hizo un fenómeno a “Barbie” y benefició enormemente a “Oppenheimer”. La idea del “combo” ayudó en gran medida a “Oppenheimer”, un thriller biográfico con tres horas de duración y un presupuesto de 100 millones de dólares. La película ya era atractiva, desde luego, al ser dirigida por Christopher Nolan, responsable de “Batman regresa”, “El origen” e “Interestelar”, pero la estrategia hizo que se cambiar el “o” por el “y”. Recrear algo igual será difícil y no es el punto. Lo es el que el público recupere el hábito de ir al cine y de hacerlo la primera semana. Si antes había quiénes esperaban a saber qué se decía de un título, ahora ello se ha incrementado. Disney / Pixar es uno de los grandes afectados. Sus películas implican que familias vayan al cine. Entonces, los padres deben decidir si vale la pena el gasto de entradas y comida o si esperan un par de meses y tienen la cinta por la mensualidad que ya pagan por Disney+. La experiencia no es la misma, desde luego, pero la balanza debe inclinarse de nuevo para que haya premura por volver al cine y también para que haya claridad. En estos días no es raro que la gente no sepa qué llega donde y eso tampoco ayuda.