“Sonido de libertad” es uno de los filmes más exitosos de 2023 con 156 millones de dólares recaudados (y contando) de un presupuesto de 13. Es también uno de los filmes más comentados y más controversiales. Es el filme independiente que “hay que ver” y a cuya polémica se ha sumado al cierre de edición el arresto de Fabián Marta, financiador del proyecto, por secuestro de un menor.
Estrenada el 4 de julio en EE. UU. y con lanzamientos en todo el mundo posterior a ello (a México llega los últimos días de agosto), “Sonido de libertad” es una ficción basada en la historia de Tim Ballard, un agente del gobierno norteamericano que trabajó en la Operación Ferrocarril Subterráneo y que tenía por enfoque combatir organizaciones de tráfico sexual. El proyecto se concluyó en 2018 y de ahí enfrentó varios avatares para conseguir finalmente ser exhibida. La distribuidora es Angel Studios que tiene por enfoque cintas de corte católico. Los involucrados, director, productor (el otrora actor y cantante mexicano Eduardo Verástegui) y protagonista (Jim Caviezel, famoso por “La pasión de Cristo”) son también católicos. “Sonido de metal” tiene un 68% de los críticos en el meta sitio Rotten Tomatoes y un 99% del público, por qué tiene ese impacto es tema de una próxima columna, por qué es el filme del momento a continuación:
Tema
El tema central de “Sonido de libertad” es el abuso a menores, el tráfico de menores para fines sexuales para ser precisos. De hecho, la propia frase promocional (“Los niños de Dios no están a la venta”) apunta justo a ello. “Sonido de libertad” proporciona cifras al respecto y tiene sus momentos más emotivos relacionados con ello. La perspectiva del filme coloca al espectador bajo la perspectiva de Tim Ballard, el protagonista, por lo que se convierte desde la ficción en un agente de rescate. Es claro, además, que cualquier persona querría evitar el tráfico de menores y se sentiría indignado por ello. Sin ser un spoiler, el filme se centra en dos hermanos, ambos secuestrados para dicho fin. El menor es rescatado y la historia va de que se consiga lo mismo con su hermana. La dinámica funciona a modo de thriller, con mucho suspenso, pero, además, está centrada en la esperanza de que ello suceda, de “salvar” a alguien mientras se es testigo de la historia. El sentido de realidad ayuda, aunque los eventos específicos no sucedieron.
Estrategia de marketing
Un elemento central para el éxito del filme es la estrategia utilizada por Angel Studios pidiéndole a la gente que si consideran que el contenido es relevante compren un boleto para que alguien más pueda verla. Eso aparece como un mensaje al final de la cinta y se ofrece un link al sitio. Se complementa indicando “para alguien que de otra manera no podría ver esta película”. Esto ha creado, por un lado, una sensación de compromiso cívico, de contribuir a visibilizar el tema, uno de los mensajes centrales. Sin embargo, por otro lado, da la sensación de que más personas de la han visto más personas de las que en realidad lo han hecho pues una gran mayoría de esos boletos comprados en esa modalidad no fueron realmente usados
Los involucrados
Un gran tema de polémica son los involucrados. Eduardo Verástegui se ha convertido en una figura polarizada. Sus posturas tienden a ser radicales sobre algunos temas como el aborto (está en contra), es un asiduo promotor del catolicismo (en una reciente entrevista con el periodista Jorge Ramos, por ejemplo, se pudo a rezar por él a mitad del proceso). Jim Caviezel, el actor principal, comparte la misma visión sobre el aborto y también se ha visto involucrado con algunos elementos de la teoría QAnon. Es una teoría de corte conspiracionista que indica que personajes de las más altas esferas están involucrados en tráfico de personas, en especial de menores. El personaje en quién se inspira, director, parte del equipo de producción y demás, comparten visiones similares. La productora se especializa en filmes de corte religioso y si bien el filme no es explícitamente vocal sobre ello, es claro que el subtexto está permeado de dicha ideología. Por ejemplo, está el citado eslogan (porque podría ser “los niños no están a la venta”, pero no, son “de Dios”), el que Ballard tenga 9 hijos y que indica que no hay un uso de anticonceptivos, el nombre del protagonista (Timoteo que significa “el que adora a Dios”), entre otros tantos más. A todo ello se suma el arresto de Fabián Marta, financiador del proyecto, por secuestro de un menor. Ello sugiere incongruencias entre lo que se dice y lo que se hace.