Las marcas personales y comerciales se ven determinadas por el contexto social, que ha impactado el día a día de estas grandes organizaciones y personalidades, quienes se encuentran interesadas en todo momento por lograr acciones orientadas a ganar el interés del mercado.
Una ejemplo de lo anterior lo encontramos con millonarios como Bill Gates, con apuestas como la Fundación Bill y Melinda Gates, una organización con la que ha logrado generar un papel social determinante a nivel internacional, al marcar una agenda de desarrollos que han logrado generar una imagen de mejora del entorno donde se encuentran.
La relación que guardan las personalidades con las marcas de las que son fundadores o con las que se asocian en estrategias publicitarias para cumplir con objetivos comerciales, se ha extendido cada vez más, ahora que estas marcas están determinadas a lograr mayor impacto.
Volvamos al ejemplo de Bill Gates y su relación con marcas como Microsoft. Esta dupla se ha convertido en una de las grandes parejas en la mente de mercadólogos, inversionistas, tecnólogos, en fin, los ejemplos que se suman a este tipo de asociaciones en las mentes de los consumidores nos lleva a observar lo que ocurre con Jeff Bezos y Amazon; Steve Jobs con Apple, compañía de la que fue CEO. En México, este tipo de asociaciones nos lleva a observar lo que ocurre con Carlos Slim y Ámerica Móvil, Claro y Giant Motors, tres marcas que están dando de qué hablar.
En el caso de América Móvil, esta podría ver cambios en el rigor de la reforma en telecomunicaciones que le impidió cobrar tarifas de interconexión, lo que plantearía un nuevo escenario comercial y de competencia para la marca de telecomunicaciones.
Claro, por su parte, ha buscado fortalecer su brazo de contenidos como estrategia comercial, con el acuerdo al que llegó con la marca de televisión china Hisense, para ofrecer una aplicación de la plataforma preinstalada en las pantallas de la marca, hecho que termina fortaleciendo el mercado de plataformas de streaming de videos digitales.
Giant Motors, la empresa en donde Carlos Slim tiene una nutrida inversión, mantiene sus planes de desarrollar vehículos que reemplacen a los taxis en la ciudad de México, en una apuesta de movilidad que pone de relieve el papel de las marcas que buscan impactar en el marketing urbano, como una estrategia que da valor a sus nombres y define su trascendencia a través de desarrollar productos que respondan a la necesidad del mercado, en este caso, el transporte a través de medios sustentables.