En México existen alrededor de 52.9 millones de personas económicamente activas; es decir, que tienen algún tipo de trabajo -ya sea formal o informal- de acuerdo con datos del Instituto Nacional de Geografía y Estadística (Inegi).
Sin embargo, millones de personas por un puesto de trabajo, por ello todos los detalles son relevantes para conseguirlo. Uno de los puntos más complicados en el proceso de búsqueda es la entrevista de trabajo.
Esta constituye un diálogo con el especialista en recursos humanos, pero además una profunda investigación de quien aplica. Entre los principales tips de diversos estudios están ir vestido formal a la entrevista, esperar a que te llamen y realizar un currículum completo, pero a veces resulta contraproducente, tal como se puede ver punto por punto:
Vestimenta formal
Este elemento es subjetivo. Mientras algunos reclutadores consideran un vestido con largo debajo de las rodillas para las mujeres y un traje para los hombres, otros ven excesivo e look. Depende la perspectiva del reclutador, pero con las redes sociales se puede detectar fácilmente sus preferencias por medio de sus redes sociales.
Además, hay que considerar el ámbito para el que se aplica porque un creativo de agencia probablemente preferirá unos tenis que un traje demasiado formal.
Esperar la llamada o el mail
El “nosotros te llamamos” no denota que el candidato no pueda llamar para dar seguimiento a la entrevista, por el contrario, contactar con la compañía después de acudir a dicho filtro, le daría mayores oportunidades de ser tomado en cuenta.
CV demasiado completo
Proveer la información requerida es uno de los motivos por los que el currículum vitae pasa el primer filtro, pero el error que se comete en entrevista es tener una extensión tan amplia que el entrevistado termine tardando más de 10 minutos en la entrevista one to one, esto aburrirá al reclutador y podría poner el riesgo a quien aplica porque puede decir cosas que están de más.