Uno de los trabajos más importantes de los lĂderes es decirle a la gente lo que está sucediendo, incluso cuando las noticias son malas. Desde Entrepreneur sostienen los lĂderes deben poder abordar todo, desde un problema de rendimiento individual hasta la denegaciĂłn de presupuesto para personal nuevo u otros recursos, la pĂ©rdida de un cliente o proyecto, asĂ como una amenaza existencial para el negocio.
De tal modo que te presentamos cuatro errores comunes que los lĂderes pueden cometer si no han recibido la capacitacicĂłn adecuada o si no han desarrollado la confianza para plantear la situaciĂłn con claridad.
Dejar que se filtren las noticias.
No es recomendable mencionar fragmentos de reuniones con otras personas en el supuesto de que el destinatario de alguna manera “capte el mensaje”. Sin embargo es extraño que otras personas sepan qué es continuar antes de que el individuo crucial lo haga, y es confuso para el destinatario de las malas noticias no entender la situación completa del todo claro.
Algunos empleados perderĂan completamente el punto y tu comportamiento o desempeño no mejorarĂa. Además, el lĂder parecĂa dĂ©bil e ineficaz; ahora todo se prepara intensamente antes de las conversaciones difĂciles.
Swooping.
Muchos lĂderes no se dan cuenta de que esto es lo que están haciendo. Creen que están siendo directos y avanzan, pero para el receptor puede parecer que alguien acaba de descargarlos y luego los dejan solo para limpiar el desorden.
Desmoralizar anĂmicamente a un grupo de trabajo puede resultar sumamente contraproducente ya que, si bien existen elementos fuertes que pueden regresar la estabilidad emocional al resto de sus compañeros, no siempre esto va a suceder.
Hablar por ambos lados.
Los lĂderes que hacen esto en lugar de darle tiempo y aliento al destinatario para hacer por preguntas o compartir reacciones están indicando al receptor que acepte las malas noticias sin protestas ni cuestionamientos.
Mientras tanto, tus empleados a menudo necesitan más informaciĂłn, apoyo o consuelo para poder aceptar el cambio o implementar la nueva direcciĂłn. En ocasiones, otros ejecutivos podrĂan brindar la ayuda necesaria, pero en otros caso, los cambios se estancaban hasta que alguien desarrollaba el coraje de reabrir la discusiĂłn y explicar las barreras para la implementaciĂłn.