Carlos Andrés Mendiola
@carlosamendiola
“IntensaMente 2” es la bocanada de aire que necesitaba con urgencia la taquilla.
2024 inició siendo un año de bajas expectativas para el cine tras un efecto dominó que se desató por las huelgas de guionistas y actores y los resultados agridulces del verano 2023 que dejaron una ola de películas que quedaron debajo de las expectativas (“Rápidos y furiosos X”, “Misión imposible: Sentencia Mortal”) o bien fracasaron (“Indiana Jones y el dial del destino”, “La casa embrujada”), obligando a los estudios a replantear modelos de negocio, estrategias de mercadotecnia y distribución, talento y otros aspectos más.
Hasta el momento 2024 ha tenido contados títulos que han cumplido (“El planeta de los simios: Nuevo reino”, “Godzilla y Kong: Nuevo imperio” y “Kung Fu Panda 4”), uno que ha quedado arriba de las expectativas iniciales (“Bad Boys: Hasta la muerte”) y varios más que se quedaron abajo (“Desafiantes”, “Furiosa”, “Profesión peligro” y “Amigos imaginarios”, ésta última parece saldrá del paso como un sleeper hit).
“IntensaMente 2” es la única película del año que, hasta el momento, ha funcionado como un blockbuster.
La secuela del filme de 2015 rompió toda expectativa. Las proyecciones iniciales indicaban que haría en Estados Unidos entre 80 y 90 millones de dólares e hizo 155, más otros 140 en la taquilla global para un total de 295.
Al cierre de edición es ya la cuarta película con más taquilla del año con 481 millones de dólares y muy probablemente se convierte en la tercera o segunda.
El primer lugar lo tiene “Duna Parte 2” con 711 millones de dólares; “IntesaMente 2” lo estará ocupando en las próximas semanas. El filme rompió récords de taquilla con el mejor debut en Colombia, Turquía, Paraguay, México, Argentina, Chile, Uruguay, Grecia y Perú.
Para Pixar, estudio líder en animación y perteneciente a Disney, “IntensaMente 2” era esencial dado el fracaso de “Lightyear” el año pasado y dado que “Soul”, “Luca” y Red” estrenaron durante la pandemia, en tiempos de ajuste de modelos de negocios como resultado y estrategias para motivar la suscripción a Disney+. El desempeño de “IntensaMente 2” deja tres aprendizajes esenciales:
La animación sigue funcionando en salas de cine.
La gran duda para Disney y Pixar era si el público se habría acostumbrado a ver sus filmes en Disney+ y si quizás la estrategia que sirvió para sumar suscriptores les había resultado contraproducente.
Los ejemplos habían sido “Wish: El último deseo” y “Lightyear”, incluso títulos de Marvel podrían entrar en la lista. Sin embargo, “IntensaMente 2” ha demostrado que mercadeado de manera correcta (y la publicidad, presente desde semanas, meses antes, y muy insistente el fin de semana del estreno, dejaron claro que era “el evento” y “la actividad” para el fin de semana).
A las variables a considerar hay que sumar el costo que implica ir al cine contra esperar la película en plataformas o bien las primeras opiniones. Desde luego, ayuda el que el filme tiene un 91% de la crítica en un meta sitio como Rotten Tomatoes y uno mayor, ahí mismo, del público, con 96%.
Las secuelas y derivados siguen teniendo un mayor atractivo
Una crítica constante a Hollywood es la constante de secuelas, precuelas, spin off’s y demás. Sí, no es una garantía (ahí está “Furiosa”, la propia “Lightyear”), pero ayuda.
En semanas recientes Pixar ha dejado saber que trabaja ya y privilegia posibles continuaciones de “Los Increíbles” y “Buscando a Nemo”, por ejemplo.
El propio Pete Docter, CCO de Pixar, respondió al respecto en entrevista para Time que sí habrá más secuelas, pero que será un equilibrio y que es difícil pues la gente dice querer algo “nuevo”, pero que ello no necesariamente significa que vayan a pagar por verlo y que con las secuelas hay una familiaridad que se traduce a un insight muy sencillo: “sé que me gusta” y eso allana el camino en mucho.
Lo universal sigue siendo lo esencial
El otro rumor alrededor de Pixar ha sido que dejarán de hacer aquellas ideas que son muy personales para los directores. Esa interpretación es un tanto errónea.
La propia esencia de Pixar está en ello y filmes clásicos o esenciales del estudio surgieron así (“Buscando a Nemo”, “Toy Story”, “IntensaMente”, “Monsters Inc.”). Es un principio de storytelling. Sí, “Monsters Inc” es una película sobre monstruos que “espantan” a los niños o bien “IntensaMente” es sobre los sentimientos de una niña que ha cambiado su residencia, pero esos son los específicos.
Lo universal está en cómo la primera es sobre la relación de un padre con una hija y la segunda sobre cómo está bien sentirse mal. Vaya, es justo lo que está sucediendo con “IntensaMente 2” que incluye a una de las emociones más comentadas en la actualidad (la ansiedad), qué pasa cuándo se sale de control, pero también cuán necesaria es (ayuda a prever el riesgo futuro intangible como ella misma lo explica), pero no es lo único.
Lo que pasa en el interior de Riley, en la adolescencia o fuera de ella es universal. Si Pixar conserva y recupera sus dinámicas de trabajo con el material retomará una de las prácticas que ha sido esencial para su éxito.