Gran parte de las plazas comerciales de la Ciudad de México serán sometidas a diferentes pruebas de resistencia por parte de las autoridades, luego de diversos incidentes que se han registrado en algunas de ellas y el riesgo que podrían correr miles de compradores y visitantes a estos espacios de retail, informó la Secretaría de Desarrollo Económico de la Ciudad de México, –Sedeco–
El titular del organismo Francisco Caballero, dio cuenta de que serán 57 plazas en Miguel Hidalgo, 31 en Coyoacán, 31 en Cuajimalpa, 27 en Benito Juárez, 19 en Cuauhtémoc, 19 en Álvaro Obregón, 17 en Tlalpan, 13 en Gustavo A. Madero, 10 en Iztapalapa, cinco en Azcapotzalco y una en Tláhuac, además de cuatro plazas en construcción en distintos puntos de la capital mexicana.
Con esta acción se buscan prevenir riesgos de desastre y daño para los usuarios, compradores y visitantes, sobre todo después de diferentes casos que se han presentado en últimas fechas, como el derrumbe de una sección de la Plaza Artz Pedregal, el cierre de Galerías Coapa por causa de los daños generados a su estructura en el sismo del 19 de septiembre de 2017 y un reciente incendio en el mismo espacio aún cuando se encuentra todavía en proceso de remodelación.
Y es la importancia de plazas comerciales como grandes espacios de retail, de ofertas gastronómicas y como centro de promoción para las propias marcas, podría verse mermada si no se toman medidas de prevención que reduzcan los riesgos de accidentes y de siniestros, como los que ya se han presentado.
Y es que, a pesar de que ha existido un repunte de las compras en línea y espacios de comercio electrónico, las tiendas siguen siendo una alternativa de compra para las personas. Un dato que refrenda esta afirmación se encuentra en las razones por las que los compradores quieren seguir comprando en plazas comerciales y no en línea.
Por ejemplo, 60 por ciento de las personas que asisten a estos espacios en Estados Unidos aseguran que lo hacen porque pueden escoger lo que desean adquirir, mientras 39 por ciento encuentra que puede percibir el valor de los productos de manera palpable.