Muchos nos quejamos por 2019. Yo prefiero no quejarme y ponerme a trabajar.Un 2019 poco productivo, lento y recesivo. Los indicadores está claros y sí fue un año “perrón” y desafiante ¿Cómo termina el contexto mexicano en los últimos minutos de 2019? Aquí mi análisis.
México es un mercado con más de 120 millones de consumidores, grandes polos turísticos, restaurantes con infinitas opciones gastronómicas y una potencia mundial en alimentos y bebidas. Tan sólo en la zona de la colonia Polanco (El epicentro con más glam en el centro poniente de la Ciudad de México) existen más de 900 restaurantes y durante todo el año abren y cierran, son exitosos y fracasan muchas empresas de gastronomía todos los días del año.
2019 fue un año complejo y atípico en México. Como muchas veces son los arranques de un nuevo mandato presidencial (periodo de seis años). Esta año es diferente porque el nuevo presidente es de izquierda y hasta cierto punto, una izquierda radical, por primera vez en un gobierno contemporáneo. Esto ha generado cierta desconfianza en el sector empresarial mexicano, hasta cierto punto entendible y lógica. Sin embargo, la misión del nuevo gobierno mexicano es erradicar la corrupción y esto ha generado que los recursos y presupuestos de federales fluyan poco o casi nada. Esto genera una reacción en cadena que impacta en el el crecimiento de la economía. En 2019, según cifras oficiales, el crecimiento económico del país ha sido del 0% y el fantasma de la rescisión mundial genera más miedo empresarial. Otro dato clave es el que acaba de liberar la (Asociación Nacional De Tiendas De Autoservicio y Departamentales) ANTAD, el consorcio de retailers mexicanos publicó en noviembre un crecimiento de las compras del 2%, que menor a la inflación del 2.5% lo que nos dice que la gente de pié no está comprando tanto, está guardando su dinero. Quizá por el clima nacional. También veo a muchas tiendas en diciembre extendiendo lo más que pueden sus promociones. Raro de ver en el pasado.
No todos son malas noticias. México ha mantenido una inflación muy baja, la más baja de Latinoamérica (Entre un 2 a 3% anual en promedio) desde hace mucho tiempo ya. Independientemente de las ideologías de los gobiernos. El precio del dólar esta estable. Justo en esta semana, cifras del gobierno anuncian un indicador impactante. Más 26 mil millones de dólares de inversión extranjera directa en 2019, cerca de un 7.8% de incremento en esta confianza de empresas internacionales. Esto es algo nunca visto en la historia actual mexicana. El segmento “popular” está empoderado económicamente y son en su mayoría los que votaron al nuevo presidente y su base electoral leal.
El punto es que hay un nuevo régimen, un cambio de intereses económicos, sociales, culturales y políticos. Que genera un periodo de transición y acomodamiento. Exige que las marcas , los productos y las empresas emprendan una renacimiento y reinvención porque el mercado ha cambiado mucho. De forma drástica, a nivel local, regional y mundial. Un enfoque y visión a nuevos mercados (Centennials, segmento popular y clase media ascendente). Es necesaria frescura, apertura, enfoque real, autenticidad y dinamismo.
Ahora si eres de los que se quejan y están espantados de todo lo que vivimos en 2019, es necesaria una transición de un año perdido, ¿Cómo se hace eso? Te digo cómo en 5 pasos clave.
Quítate de complejos, odios, malas vibras y polarización. Ya olvídete de eso. Si sigues enganchado en lo mismo, no saldrás adelante. No veas al pasado de esa forma.
Si perdiste en el año, es tiempo de recuperarte. Repliégate. Concéntrate en ver cuáles son tus gastos fijos básicos como agencia o como marca y resérvalos. No gastes si no es indispensable.
Observa mes a mes qué fue lo que pasó y cómo pasó, por qué paso y de que forma pasó. Sin carga emocional, sólo los hechos. Enfócate en saber qué salió mal y por qué salió mal. Lo más importante aquí es saber que salió bien. Para retomarlo y hacerlo más.
La transición a un año perdido no sirve de nada si no entendemos de los fracasos o errores, sin encontrar culpables ¿Cambió el marcado? ¿Qué cambio y cómo cambio? ¿Estoy listo para afrontar el cambio?
Inicia el 2020 con una nueva visión comercial con ganas de reinventarte y emprender en cosas diferentes, novedosas, que impliquen reinvención. Siempre en la cancha de las cosas que haces bien y para lo que eres bueno.