Puede que ocurra más constantemente en lunes o recién terminadas las vacaciones-irónicamente-, pero en cualquier momento puede ocurrir que los ánimos decaigan en medio de la actividad profesional y eso puede resultar muy grave, sobre todo cuando tienes muchos compromisos en puerta.
Deja de posponer tus responsabilidades creativas, sacúdete la desidia -se define como falta de cuidado o negligencia para hacer las cosas- con los diez pasos que te vamos a recomendar a continuación.
1. Conócete a ti mismo
Es el primer paso para entender las causas de la desidia y evitarlas.
2. Administra tu tiempo.
Establecer un tiempo para realizar cada actividad del día y apegarse a ellas.
3. Cambia el punto de vista de las cosas
Pensar que las actividades que se tienen pendientes son agradables e interesantes.
4. Comprométete con el trabajo asignado
Hacer una lista de los pendientes y tachar los que ya se llevaron a cabo ayuda.
5. Desarrollarte en ambientes productivos
Se recomienda trabajar lejos de distractores, para ayudar a la concentración.
6. Sé realista
No hacer una lista interminable de cosas, al final del día no alcanzará el tiempo para hacerlas.
7. Motivarse a uno mismo
Aleja los pensamientos negativos antes de comenzar una actividad y motívate a lograr la meta que se consigue con ella.
8. Crear un horario flexible
Los horarios rígidos sólo consiguen estresar a las personas.
9. Combinar la tareas
Hacerlo ayudará a lograr la mayor cantidad de tareas, lo ideal es mezclar una difícil con una fácil.
10. No fantasear con los resultados
Esto puede frustrar a las personas, en cambio si se piensa de manera práctica se logran mejor los objetivos.