Al tomar la decisión de trabajar por cuenta propia hay que considerar que ahora sólo habrá una persona encargada de ver los presupuestos, la contabilidad, facturación y encargado de relaciones públicas que permitan ampliar los horizontes.
1. Mide tus finanzas
Tienes que contar con un capital suficiente para responder a las responsabilidades y compromisos que tienes frente a ti.
2. Establece contactos personales y profesionales
Ten presencia en redes sociales y sitios como Behance, los cuales harán público tu portafolio, tus logros y tus experiencias profesionales.
3. Aprende a administrar tu tiempo
Ten a la mano un cuaderno de apuntes y bolígrafo para hacer una lista de las tareas para realizar. También puedes usar dispositivos digitales.
4. Trata a los clientes con calidad
Cada uno de tus clientes es diferente y merece un trato personal, si estás en riesgo dela relación se ponga tensa es mejor mantener una actitud positiva.
5. Establece tus precios
El precio es uno de los aspectos más difíciles de trabajar independientemente, pues en ocasiones se puede dificultar al principio porque los clientes tienen un presupuesto fijo, pero siempre queda la vía de la negociación.
6. Saber cuándo decir no
Es importante que sepas en qué clase de trabajo estás postulándote, si existen aspectos que no te llenan o no te dan buena espina, es mejor que sepas decir que no e ir en busca de otra oportunidad.
7. Evitar las trampas
El mayor peligro es la venta barata de uno mismo. Es importante entender desde el principio que el pago servirá para cubrir sus gastos de negocios, de impuestos y del servicio. No se debe abaratar el precio de trabajo por que la casa pierde.
8. Evitar el agotamiento
Tomar un descanso parece ser una de las cosas más difíciles de hacer para un profesional independiente, pues un día festivo no es remunerado.
9. Encuentra tu espacio de trabajo ideal
Puede ser la mesa de la cocina, el cuarto de atrás, un estudio compartido o una oficina alquilada, pero debe ser un espacio especial para trabajar.