La publicidad es algo más que una efectiva herramienta para impulsar las ventas. En más de una ocasión se ha hablado de la capacidad de los comerciales y campañas para marcas épocas y etapas del consumidor, situación que pone a la publicidad en una posición interesante como constructor del imaginario social.
Esta posición se ha visto especialmente generalizadas gracias a la llegada de la era digital, en donde el consumidor ha dejado de ser un simple espectador para ser parte de esta construcción cultural.
El rol del consumidor
Lo interesante es reconocer el fenómeno que hay detrás. Una de las principales consecuencia que trajo consigo la llegada de las nuevas tecnologías fue la democratización de la comunicación. Los usuarios hoy no sólo tienen infinitas posibilidades para acceder a información en todo momento y lugar en tiempo real generada incluso a cientos de kilómetros de su ubicación física; el gran cambio está en la evolución de un receptor pasivo a uno con la capacidad para desarrollar información con niveles de sofisticación, alcance e influencia similar al que sólo hace una década era territorio exclusivo de medios de comunicación y agencias de comunicación.
Para la industria publicitaria, el fenómeno es un tema de suma importancia si consideramos que en su labor por cautivar la atención de las audiencias e influir en sus decisiones se enfrentan a un nuevo competidor que es difícil de entender, predecir y controlar.
Hablamos de la relevancia que en la arena de la comunicación tiene el contenido generado por los usuarios (conocido como CGU) en la construcción del imaginario colectivo y, por tanto, en la relación que las marcas establecen con sus targets.
Al respecto, desde Audiense apuntan que al realizar una búsqueda online sobre alguna de las 20 principales marcas en el mundo, el 25 por ciento de los resultados obtenidos son enlaces a contenidos generados por las propias audiencias, mientras que en plataformas como Youtube los videos que entran en la categoría de contenido CGU son vistos 10 veces más que el contenido oficial de cualquier firma comercial.
Comerciales que marcaron época
Si bien este fenómeno revolución la manera en la que los consumidores se relacionan con los comerciales y demás estrategias, la realidad es que en tiempos pasados, la publicidad consiguió mediante otros formatos y canales también ser referente cultural, situación que ahora se ve reflejada en la nostalgia y recuerdos que muchos spots traen a la mente del consumidor.
Así es como el llamado “marketing de nostalgia” ha logrado ser especialmente popular en tiempos recientes, considerada como una variante que no hace más que exaltar uno de los principales valores de la publicidad: las emociones.
Esto toma aún mayor relevancia cuando consideramos el papel que ahora las marcas tienen en el día a día de los consumidores. De acuerdo con un reporte presentado por Havas Media, el 45 por ciento de los consumidores globales entre 16 y 34 años aseguran que las marcas juegan un papel esencial en sus vidas, afirmación que entre el segmento de personas que tienen entre 35 y 54 años ocupa el 30 por ciento y entre aquellas de más de 50 años alcanza el 22 por ciento.
Así la conexión emocional se ubique como un indicador de peso para la generación y crecimiento de cualquier negocio. Así, una reciente investigación firmada por Harvard Business Review indica que los clientes conectados emocionalmente con sus marcas son entre 25 y 100 por ciento más valiosos al hablar de rentabilidad que aquellos que simplemente se dicen satisfechos.
Con esto en mente y tomando como pretexto una celebración más del Día del Niño compartimos 10 comerciales que sin duda te remontarán a tu infancia gracias al poder de la emocional de la publicidad:
Tang
Gansito Marinela
Kisses
Bimbo
Microhornito
Apache
Power Wheels
Coca-Cola
Sabritas
Pepsi