En Francia, 70 por ciento de las usuarias de internet, ha adquirido online, productos de cuidado para el rostro, como cremas y limpiadoras, tal como señala el reciente estudio de CCM Benchmark, en el que también consta que el 65 por ciento ha comprado maquillaje y 60 por ciento, productos para el cuerpo.
Puede que más sorprendente aun sea que las usuarias de internet en Francia tiendan a preferir los sites de las marcas, que los vendedores autorizados para realizar estas compras online.
De hecho, un 57 por ciento de las participantes aseguraron que compraban directamente a las marcas, seguido del 50 por ciento que lo hacía en cadenas como Sephora o Marionnaud.
La tercera opción de las usuarias es el de ventas privadas o grupos de consumo (por ejemplo vente-prive. com) con 40 por ciento, mientras que los vendedores como Amazon eran usados por un 32 por ciento para comprar este tipo de productos.
En general, cerca del 60 por ciento de las usuarias ha comprado cosméticos en internet, de las cuales, un 98 por ciento ha utilizado para ello su ordenador de escritorio o laptop, 39 por ciento la Tablet y 28 por ciento el smartphone.
Y es que a las compradoras digitales francesas, según otro estudio de mayo de 2016 de DigitasLBi, la compra de productos de belleza y bienestar es algo que suelen hacer con mayor frecuencia que sus contrapartes de Europa Occidental, como asegura un 76 por ciento.
Por ello no extraña, que a nivel de redes sociales, también suelan interactuar más con las marcas de moda y belleza, como lo hace el 40 por ciento de las usuarias, una cifra que según la investigación de Adobe Digital Index es mayor a las interacciones que se dan sobre otros temas como deportes, viajes y tecnología.
Un fenómeno que muestra que a pesar de lo que se pueda pensar sobre este tipo de productos y la necesidad de ‘tocarlos’ en tiendas físicas, tiene un futuro promisorio entre las usuarias digitales, especialmente si se determinan las motivaciones, que como a las francesas, lleva a las internautas a decantarse por este canal.
