Por Fernando Rosas
San Sebastián, España.- Es una verdadera pena confirmar lo que muchos sospechaban: la creatividad mexicana no está en uno de sus mejores momentos, ni en el concepto mismo de las ideas, ni en el ánimo de las inversiones; cuando menos, esto es lo que cualquier persona puede derivar de darse un paseo por El Sol, Festival Iberoamericano Publicitario, que se celebra en San Sebastián, País Vasco.
Y si a esto se le quisiera poner más lumbre, en Gráfica, de las piezas mexicanas inscritas, a reserva de confirmarlo, quizá solo una de ellas no es trucho —no es consuelo que colegas españoles digan que la misma percepción tienen de varios trabajos presentados de su propio país.
Será un verdadero triunfo el que una pieza mexicana obtenga, ya no se diga un Oro, sino cualquier metal. Entre los que tienen mayores posibilidades, están el trabajo para Film que hiciera Draftfcb para el Banco de México, con Repartidor, y Circo de Scrabble para Gráfica creada por Ogilvy México.
En términos generales, los trabajos mexicanos presentados para Film, tienen buen nivel, pero no son geniales, y ese es el brinco que falta dar. Lo curioso es que hoy existen campañas en medios mexicanos que seguro obtendrían muy buenos resultados, pero que brillan por su ausencia. Uno podría esperar que la cifra de piezas inscritas subiera año tras año, pero la realidad es que, mientras incrementan su participación países como Argentina (+4.42 por ciento), Chile (+45.45 por ciento), España (+15.05 por ciento) y Colombia (+270 por ciento); México la lleva para abajo (-20.23 por ciento).
Y si eres de esos publicistas que en este momento dicen: “es que a nosotros no nos importan los premios, para nosotros el negocio de nuestros clientes es lo más importante”, quizá esta sea una de las respuestas al porqué el nivel de gasto dirigido a comunicación comercial en México, es de los más bajos del mundo. Es decir, “santo que no es visto no es adorado” y los éxitos en festivales tienen una repercusión mediática muy importante.