Internacional.- Durante el pasado Congreso AMAI 2013, uno de los temas más importantes que se expusieron fue el caso de las estrategias de lovemark. Una “marca amorosa” es aquella que logra posicionarse en el marcado con base en aspectos como sentimientos y emociones para que sus mensajes logren crear lealtad más allá de la razón, lo que les proporciona una diferenciación especial en las estrategias de mercadotecnia.
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El lovemarketing, por tanto, es un conjunto de exacciones que sirven para aumentar la lealtad de los consumidores y se basa en los valores subjetivos de una marca con el fin de crear vínculos emocionales.
Para implementar estrategias de lovemarketing debes tener en cuenta que:
- El lovemark puede ser una muy buena estrategia para aquellas empresas que les ha costado diferenciarse con su público.
- A los consumidores fieles a una marca les gusta hablar de su relación con ella, así como de sus productos y servicios.
- Las marcas se convierten en lovemarks cuando generan una experiencia positiva que resulta significativa para el usuario.
- La marca debe poseer mensajes que sean comunicados y que inspiren al público, es decir, que generen confianza.
- Siempre cumplir con las promesas de marca, porque la buena reputación y la satisfacción del cliente es la piedra angular del amor hacia ella.
El reto principal es formar consumidores apasionados, lo que se logra diferenciando a la marca de todas las demás y sobre pasar las expectativas.
La clave para generar una lovemark, en resumen, puede definirse como “crear una experiencia”, pero tal como sucede en el amor, una marca o producto debe estar dispuesta a enamorar al cliente a partir de conocerlo, identificar sus expectativas e ir más allá de ellas ganándose su confianza.